viernes, 28 de septiembre de 2007

Riqueza, Éxito y Amor


Una preciosa historia para leer y comprender lo que es realmente importante en la vida. Espèro que os guste.


Riqueza, Éxito y Amor

Una mujer salió de su casa y vio a tres viejos de largas barbas sentados frente a su jardín. Ella no los conocía y les dijo:

—No creo conocerlos, pero deben tener hambre. Por favor entren a mi casa para que coman algo.

Ellos preguntaron:

— ¿Está el hombre de la casa?
—No, respondió ella, no está.
—Entonces no podemos entrar, dijeron ellos.

Al atardecer, cuando el marido llegó, ella le contó lo sucedido.

— ¡Entonces diles que ya llegué, invítalos a pasar!

La mujer salió a invitar a los hombres a pasar a su casa.

—No podemos entrar a una casa los tres juntos, explicaron los viejitos.
— ¿Por qué?, quiso saber ella.

Uno de los hombres apuntó hacia otro de sus amigos y explicó:

—Su nombre es Riqueza. Luego indicó hacia el otro:
—Su nombre es Éxito y yo me llamo Amor. Ahora ve adentro y decidan con tu marido a cuál de nosotros tres desean invitar a vuestra casa.

La mujer entró a su casa y le contó a su marido lo que ellos le dijeron. El hombre se puso feliz:

— ¡Qué bueno! Y ya que así es el asunto entonces invitemos a Riqueza, que entre y llene nuestra casa.

Su esposa no estuvo de acuerdo:

— Querido, ¿por qué no invitamos a Éxito?

La hija del matrimonio estaba escuchando desde la otra esquina de la casa y vino corriendo:

— ¿No sería mejor invitar a Amor? Nuestro hogar estaría entonces lleno de amor.
— Hagamos caso del consejo de nuestra hija, dijo el esposo a su mujer. Ve afuera e invita a Amor a que sea nuestro huésped.

La esposa salió y les preguntó:

— ¿Cuál de ustedes es Amor? Por favor que venga y que sea nuestro invitado.

Amor se puso de pie y comenzó a caminar hacia la casa. Los otros dos también se levantaron y le siguieron. Sorprendida, la dama les preguntó a Riqueza y a Éxito:

— Yo invité sólo a Amor, ¿por qué Uds. también vienen?

Los viejos respondieron juntos:

—Si hubieras invitado a Riqueza o a Éxito los otros dos habrían permanecido afuera, pero ya que invitaste a Amor, donde vaya él, nosotros vamos con él. Donde quiera que hay amor, hay también riqueza y éxito.

*:-.,_,.-:*'``'*:-.,_,.-:*'``'*:-.,_,.-:*'``'*:-.,_,.-:*'``'*:-.,_,.-:*

MI DESEO PARA TI ES... Donde haya dolor, te deseo paz y misericordia. Donde hay falta de fe en ti mismo, te deseo una confianza renovada en tu capacidad para superarla. Donde haya temor, te deseo amor y valor.

jueves, 13 de septiembre de 2007

GALEANO

LA ENTRADA DE HOY ES GENTILEZA DE MI LINDA SOBRINA ROMI, GRACIAS PRECIOSA

Las voces porfiadamente vivas

Hay un único lugar donde ayer y hoy se encuentran, se reconocen y se abrazan y ese
lugar es mañana. Suenan muy futuras ciertas voces del pasado americano muy pasado.
Las antiguas voces, pongamos por caso, que todavía nos dicen que somos hijos de la tierra,
y que la madre no se vende ni se alquila. Mientas llueven pájaros muertos sobre la
ciudad de México, y se convierten los ríos en cloacas, los mares en basureros y las selvas
en desiertos, esas voces porfiadamente vivas nos anuncian otro mundo que no es este
mundo envenenador del agua, el suelo, el aire y el alma. También nos anuncian otro
mundo posible las voces antiguas que nos hablan de comunidad. La comunidad, el modo
comunitario de producción y de vida, es la más remota tradición de las Américas, la más
americana de todas: pertenece a los primeros tiempos y a las primeras gentes, pero también
pertenece a los tiempos que vienen y presienten un Nuevo Mundo. Porque nada
hay menos foráneo que el socialismo en estas tierras. Foráneo es, en cambio, el capitalismo:
como la viruela, como la gripe, vino de afuera

Eduardo Galeano de El libro de los abrazos

martes, 4 de septiembre de 2007

CORAZON CORAZA

CORAZÓN CORAZA

Porque te tengo y no
porque te pienso
porque la noche está de ojos abiertos
porque la noche pasa y digo amor
porque has venido a recoger tu imagen
y eres mejor que todas tus imágenes
porque eres linda desde el pie hasta el alma
porque eres buena desde el alma a mí
porque te escondes dulce en el orgullo
pequeña y dulce
corazón coraza

porque eres mía
porque no eres mía
porque te miro y muero
y peor que muero
si no te miro amor
si no te miro

porque tú siempre existes dondequiera
pero existes mejor donde te quiero
porque tu boca es sangre
y tienes frío
tengo que amarte amor
tengo que amarte
aunque esta herida duela como dos
aunque te busque y no te encuentre
y aunque
la noche pase y yo te tenga
y no.

Mario Benedetti